Situaciones desesperadas en ocasiones requieren medidas desesperadas

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En estos tiempos en que las fuentes de trabajo escasean bastante, y que la edad del solicitante es tomada muy en cuenta, conseguir un trabajo se vuelve una tortura y una fuente de estrés, debido a que al ya estar uno mayor -hasta los 35 parece ser ya el límite de edad aceptable-, las empresas le comienzan a hacer el feo a uno, La búsqueda por un trabajo digno es cada vez más complicada, y se le exige a uno el conocer -por lo menos, en mi caso, el de programación- un gran número de lenguajes y herramientas, que en algunos casos, su uso esta fuera de contexto -como sería el caso de un programador con conocimientos de manejo de un consultorio veterinario o una farmacia-.

Lo más desesperante es que a uno, después de hacer mil y una entrevistas y pruebas, le digan: "muchas gracias, después nos comunicaremos", y que pasados 15 a 20 días, no se sepa nada del resultado de la entrevista, y que al cuestionársele por ello, solo respondan "el puesto se ocupó hace 7 días, muchas gracias por haber llamado" ó "el proceso todavía sigue, nos comunicaremos con usted más tarde" y nunca llegue dicho llamado.

Pienso que sería mejor por parte de las empresas el dar una fecha más en específico y dejar de torturar a los pobres que han ido a solicitar el puesto o simplemente avisar cuando la vacante quede cubierta -no creo que les sea tan problemático enviar un correo electrónico agradeciendo haber asistido a la entrevista e informando que la plaza ya fue ocupada-.

Esperemos que en esta nueva búsqueda que estoy emprendiendo, no me hagan esperar mucho el recibir noticias del trabajo solicitado.

Actualización: Gracias a Dios, ya logre entrar a trabajar -el único inconveniente es que se paga mensualmente y teniendo en cuenta mi presente situación económica va a ser muy complicado llegar al día de paga-. :)

En ocasiones llueve sobre mojado

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No cabe duda, en ocasiones "al perro más flaco se le cargan las pulgas", eso es muy cierto en mi caso, ya que en estos momentos estoy pasando por una situación económica algo preocupante -una perdida de trabajo, deudas altas a tarjetas de crédito, etc.- y de pilón, hace como un mes y medio, me paró un agente de tránsito, y estuve a punto de que remolcaran mi camioneta a un depósito y ser multado -lo que hubiera hecho que fuera muy difícil sacarla al no contar con dinero para ello-, y para acabarla de amolar, me dijo el agente de tránsito, que por contar con placas de otro estado y no estar al día con la tenencia, ya no me sería posible sacarla de casa sin ponerla en peligro de que la vayan a remolcar, por lo que deberé arreglar su situación y venderla lo más pronto posible (por supuesto, hasta que tenga dinero).

!!La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida¡¡

Etiquetas de Bitacoras : desempleo, sorpresas, despotismo

No cabe duda, de que los hay los hay, y un ejemplo de que existe gente que dirige una empresa de forma despótica me tocó vivirla a finales del mes de junio, cuando de la noche a la mañana, tan solo por caer en fin de quincena –día de pago aquí en México- y sin mediar palabra antes, fui testigo de como despidieron a un trabajador de la empresa en que estaba laborando –y digo estaba, porque como si esas exhibiciones con fichas de domino, al caer una pieza, comienza la caída en serie de las que se encuentran a continuación, y a mi me tocó salir también, debido a la salida de la persona que relato-.

Fue algo tan repentino que un día antes todavía se encontraba absorto en la toma de decisiones que implicaba su puesto –era gerente de sistemas- y al día siguiente, al comenzar sus labores, se presentan con su remplazo para que hiciera la entrega del puesto –explicar las responsabilidades y la documentación-, todo esto sin haber mención alguna de un mal desempeño, solo el simple y llano hecho de que la dueña podría haber escuchado el lloriqueo de una de sus consentidas –una mujer ya entrada en años, chismosa y mitómana-, la cual había dañado la base de datos y quería a toda costa culpar de ello a sistemas, alegando que se debieron de hacer tres respaldos del archivo de la base de datos –en lugar de los dos en que estaba pactado-.

Desgraciadamente, como esta persona de la que he estado relatando su salida, había sugerido y estaba llevando a cabo un proyecto de reforma a los sistemas existentes –ya que nunca se detuvieron a planear como llevar un bien ordenado proceso, por lo que se crearon cinco sistemas muy similares en cuanto a lo que hacen, pero con pequeñas diferencias en la información que guardaban- para poder realizar la unificación de éstos, pero, al salir esta persona, la dueña de la empresa, prefirió desechar todo lo que se llevaba del trabajo de unificación, y no darle continuidad, por lo que en mi caso, por estar prestando servicios como consultor, se me dieron las gracias –por cierto que no directamente, sino que se lo solicitaron a una persona de la misma empresa que programaba junto conmigo y que no debería de haber tenido que cargar con tan desdichada labor- por lo que pasadas como tres o cuatro horas del despido de el encargado, cayó también mi cabeza.

Creo que las empresas deberían –no todas son como esta que les relato, hago la acotación- de ver a su personal como lo que son: su capital más valioso, ya que sin ellos, el trabajo no se realizaría, y que tan solo por ser personas, son dignas de respeto y no ser desechados como cualquier foco usado.